ENTRE ESTROFAS Y ESTRIBILLOS: LA NARRATIVA DE LA MúSICA HABITUAL

Entre estrofas y estribillos: la narrativa de la música habitual

Entre estrofas y estribillos: la narrativa de la música habitual

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La música fué un espejo de los avances sociales y tecnológicos durante las décadas, adaptándose de forma continua para reflejar y a veces predecir las transformaciones de su época. Cada generación vió nacer estilos musicales que no solo definen su identidad cultural sino que también influyen en ella de maneras profundas y perdurables.



Durante los años 50 y 60, el rock and roll tomó el centro del escenario, encarnado por figuras como Elvis Presley y The Beatles, cuyas creaciones no solo musicalmente sino más bien en la actitud y presentación, sacudieron los cimientos de la sociedad conservadora. Esta era marcó el comienzo de la música como forma de queja social y como medio de unificación entre jóvenes de diferentes orígenes.

La llegada de los años 70 y 80 acarreó con su llegada la diversificación en los géneros musicales con el surgimiento del disco, el funk y ocasionalmente el punk y el metal. Artistas como David Bowie y Madonna, y conjuntos como Led Zeppelin y The Ramones, no solo fueron pioneros en sonidos nuevos sino que asimismo desafiaron las normas de género y sexualidad de la temporada, lo que llevó a una mayor expresión de la identidad personal por medio de la música.

Con la digitalización de los años 90 y el cambio de milenio, la industria musical experimentó una revolución. La llegada de Internet y las plataformas de descarga digital transformaron radicalmente de qué forma la música se generaba, distribuía y consumía. Este periodo de tiempo también destacó por el ascenso del hip-hop y el rap como automóviles de expresión cultural, usados por artistas como Tupac Shakur y Lauryn Hill para emprender cuestiones de raza, clase y política.

En la actualidad, la era del streaming ha democratizado el ingreso a la música, descartando muchas de las barreras que antes limitaban a artistas y oyentes. Esto ha fomentado una era de colaboración y fusión de géneros, donde artistas de distintas procedencias y estilos tienen la posibilidad de influir mutuamente. Artistas contemporáneos como Kendrick Lamar y Rosalía son ejemplos de de qué forma la música puede trascender fronteras culturales y lingüísticas, creando un diálogo global que refleja la variedad y la complejidad de la sociedad de la cual formamos parte moderna.

Esta continua evolución musical no solo exhibe cómo los géneros se adaptan o se convierten, sino asimismo de qué forma la música como forma de arte responde y ayuda a los movimientos sociales más amplios, conservando su rol como una poderosa herramienta de expresión y cambio popular..

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